«Lecturas sugerentes para tiempos inciertos»: con este lema nació en 2013 la editorial Hoja de Lata
Ya lo he dicho aquí en alguna ocasión: algunas editoriales parecen haber nacido con la única misión de publicar un único libro o autor. Esto sucede con editorial Hoja de Lata, que tiene un curioso claim: ‘Lecturas sugerentes para tiempos inciertos’. Al frente de la misma están Daniel Álvarez Prendes y Laura Sandoval: “Hoja de Lata nace en 2013 en Gijón haciendo de la necesidad virtud. Nos quedamos en el paro y ello nos obligó a dar rienda suelta a ese proyecto ansiado que siempre queríamos llevar a cabo”. Esta editorial que nace de la unión de un gijonés y una barcelonesa toma su nombre de una doble inspiración: por un lado, la curiosa obsesión de Daniel por envasar libros (“se trata de enviar una pequeña cantidad de ellos a los libreros más afines, a ti como periodista cultural, a lectores especiales. Esos envases están hechos de hojalata”) y, por otro lado, de la intención de publicar títulos atemporales, “como esos juguetes de hojalata que tuvieron nuestros padres y abuelos y que cincuenta años después siguen teniendo validez y siguen emocionando e ilusionando”. Así es la filosofía de una editorial que no pretende hacer un catálogo de tendencia o efímero, más bien se empeñan en confeccionar un catálogo compuesto por libros de hojalata.

A pesar de gozar de la satisfacción de publicar autoras perdidas en la historia como Carnés, Álvarez Prendes y Sandoval han tenido que superar ciertos obstáculos en estos cuatro años. Uno de ellos, por ejemplo, es el hecho de nacer fuera del centro, con el toque de exotismo que ello conlleva: “A lo largo de cuatro años las dificultades son las de partir de cero. Conocíamos el mundo editorial desde el otro lado, como libreros, pero como editores no teníamos ninguna experiencia más que los cursos de posgrado que habíamos cursado en edición, pero ni siquiera teníamos el mínimo contacto del responsable de cultura de un diario local. Han sido años de picar piedra, de practicar un continuo ensayo-error y cruzando los dedos para que ningún error nos entierre”, comenta el editor. Su misión no es otra que “jugar a la sorpresa con sus lectores”. En este mismo sentido, ellos también buscan la misma virtud en lecturas ajenas: “Yo recomendaría un libro exótico, Los casos del detective Kogoro Akechi, de Edogawa Rampo en la editorial Satori. Rampo es el padre de la novela negra japonés y esta es una antología de misterio, crimen y suspense protagonizada por el detective más célebre de Japón.
