Aunque leer se puede leer en cualquier lugar (y bien los sabemos quienes no hemos podido dejar un capítulo que estábamos leyendo en transporte público aunque ya hayamos llegado a la parada y no nos resistimos a seguir mientras esperamos a que el semáforo se ponga en rojo…), cierto es que los lectores tendemos a tener un lugar y unas condiciones de lectura que son nuestras favoritasBarómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros 2018, elaborado por la Federación de Gremios de Editores de España ha investigado sobre esta cuestión.

Se podría concluir, viendo los datos estadísticos, que si hay un lugar favorito para leer en España es nuestro propio hogar. Un 97,4% de los encuestados (mayores de 14 años que son lectores de libros) asegura que el lugar en el que suele leer habitualmente es su casa. En la edición anterior, eran el 95,9% quienes señalaban este espacio como el favorito.

Tras el hogar se posicionan como lugares de lectura habitual el leer al aire libre(15,9%, frente al 14,8% del año anterior) y la lectura en el transporte público (15,6% frente al 11,8% de 2017). Este año, el estudio también apunta datos curiosos sobre esos espacios específicos de lectura. Las mujeres leen más al aire libre. El 20% de las mujeres encuestadas reconoce que el aire libre es uno de sus lugares habituales de lectura (y quienes se hayan ido alguna vez a leer a un parque lo comprenderán).

El estudio también separa datos de lectura en transporte público de las comunidades autónomas con las ciudades más pobladas y que, por tanto, tienen poblaciones mayores atrapadas en viajes de metro y cercanías cotidianos. En Madrid sube al 29,9% la cantidad de lectores que reconocen leer habitualmente en transporte público y en Cataluña al 23,5%.

También son bastantes quienes leen en el trabajo (8,8% pero 10,3% hace un año), un dato un tanto llamativo pero que si se piensa en las pausas de comida se puede comprender mucho mejor.

Menos populares son el leer en la biblioteca (3,6%), en el centro de estudios (3,5%) o en otros lugares (21,9%, en los que han metido de forma general espacios como cafeterías o salas de espera).

Además de en dónde se lee, la encuesta también ha preguntado por cuándo se lee. Los datos apuntan que leemos más o menos siempre igual. Un 39,5% reconoce que en vacaciones lee igual que el resto del año, superando a los que aseguran que leen más cuando están de vacaciones (31,8%) o a los que leen menos (28,7%).

FUENTE: LIBROPATAS