La reina del misterio compartió, de nuevo, su tarde con nosotros.
Es apasionante su vida e increíbles sus dotes narrativas.
De su mano vivimos sus amores, especialmente el de Max, el arqueólogo que la acompañó hasta el fin de sus días.
Y también descubrimos a una mujer avanzada a su tiempo. Hacer surf una mujer en aquellos tiempos no era la más habitual del mundo.
Con ella reímos y leímos extractos de «El asesinato de Roger Ackroyd».